En la costa norte de Cantabria, tenemos un paraíso natural que seduce a los viajeros con su encanto, Liencres. Este rincón de Cantabria se presenta como un tesoro escondido, lejos de las rutas turísticas convencionales, invitando a los visitantes a una experiencia auténtica y enriquecedora.
Liencres cautiva con sus playas de ensueño, donde el mar Cantábrico abraza la costa en una danza perpetua. Más allá de las orillas, el Parque Natural de las Dunas de Liencres despliega un ecosistema único, hogar de una rica biodiversidad y refugio para aves migratorias.
El viaje a Liencres es también un paseo por senderos que serpentean entre acantilados majestuosos, como la impresionante Ruta de los Acantilados, y a través de bosques que ocultan tesoros costeros en la Ruta de las Tres Playas. Este artículo invita a explorar los secretos mejor guardados que ver en Liencres, donde la serenidad de sus paisajes se fusiona con la autenticidad de su cultura, creando así un viaje inolvidable en la costa cantábrica.
Los destinos que ver en Liencres. Qué hacer
Playas de Ensueño
Las playas más occidentales
El principal atractivo que ver en Liencres son sus playas, que se extienden a lo largo de kilómetros de costa. Entre ellas, la Playa de Valdearenas destaca con su extensa franja de arena dorada y aguas cristalinas. Ideal para un día de relax al sol o un paseo rejuvenecedor a lo largo de la orilla, esta playa combina la serenidad del paisaje con la energía vital del mar Cantábrico.
Otra joya es la Playa de Canallave, conocida por su atmósfera más salvaje y su paisaje rocoso. Aquí, los amantes de la fotografía encontrarán numerosos rincones para capturar la interacción única entre el océano y la costa. El contraste entre las olas rompiendo contra las rocas y la tranquilidad circundante crea una experiencia visual inolvidable.
La Playa de Somocuevas es otro tesoro escondido en Liencres. Rodeada de acantilados y vegetación, esta playa ofrece un entorno más íntimo y tranquilo. Es perfecta para aquellos que buscan escapar de las multitudes y disfrutar de la naturaleza en su forma más pura. La mezcla de arena suave y aguas cristalinas invita a los visitantes a sumergirse en un paraíso costero.
Las playas más orientales
También debemos hablar de la Playa de Covachos caracterizada por sus formaciones rocosas y pequeñas cuevas. Covachos es ideal para aquellos que buscan explorar y descubrir la magia escondida entre las rocas durante la marea baja. Con un ambiente tranquilo y natural, esta playa invita a los visitantes a sumergirse en la autenticidad de la costa cántabra, lejos del bullicio.
La Playa de Arnía, otra de las playas que ver en Liencres destaca por sus impresionantes formaciones rocosas, esculpidas por la naturaleza a lo largo de los años. Estas rocas calizas crean un paisaje pintoresco y ofrecen oportunidades fotográficas excepcionales. Durante la marea baja, se forman piscinas naturales entre las rocas, creando un entorno único para explorar y disfrutar.
El Parque Natural de las Dunas de Liencres y Costa Quebrada
Junto a las playas se encuentra el Parque Natural de las Dunas de Liencres, un ecosistema único que alberga una variada flora y fauna. Este espacio protegido ofrece una oportunidad única para los amantes de la naturaleza de sumergirse en un entorno dunar que ha resistido el paso del tiempo.
Pasear por los senderos bien mantenidos permite disfrutar de la rica biodiversidad y, quizás, avistar algunas de las aves migratorias que encuentran refugio en la zona.
Las dunas, esculpidas por el viento a lo largo de los años, crean un paisaje ondulado que añade un encanto especial a la región. Los estudios locales de flora y fauna también hacen de esta reserva un lugar educativo donde los visitantes pueden aprender sobre la importancia de preservar estos entornos naturales únicos.
Mirador de la Picota:
Para obtener una vista panorámica de la costa y sus alrededores, el Mirador de la Picota es un lugar imperdible. Desde esta elevación estratégica, los visitantes son recompensados con vistas que abarcan desde el horizonte marino hasta los verdes campos del interior. Es el lugar perfecto para contemplar la puesta de sol, cuando el cielo se tiñe de tonos cálidos y el sol se retira lentamente detrás del horizonte.
El mirador, rodeado de naturaleza en su máxima expresión, ofrece un ambiente tranquilo que invita a la reflexión. Los colores cambiantes del cielo y el mar crean una paleta visual que deja una impresión duradera en la memoria de quienes lo experimentan.
Además, el Mirador de la Picota es un excelente punto de observación para avistar aves marinas y apreciar la majestuosidad de la costa desde una perspectiva elevada. Si no quieres subir hasta allí tienes unas vistas parecidas a pie de carretera desde el Mirador Abra del Pas.
Rutas de Senderismo
Los entusiastas del senderismo encontrarán en Liencres un paraíso de rutas que serpentean a través de paisajes diversos. La Ruta de los Acantilados, por ejemplo, ofrece una caminata costera que permite explorar los impresionantes acantilados que bordean el mar.
La brisa marina y las vistas espectaculares hacen que cada paso valga la pena. La experiencia de caminar al borde de acantilados que se sumergen en el Mar Cantábrico es tan emocionante como serena, proporcionando una conexión directa con la naturaleza salvaje.
Para una experiencia más boscosa, la Ruta de las Tres Playas lleva a los caminantes a través de bosques de pinos y robles hasta tres playas distintas, proporcionando una perspectiva completa de la belleza natural de la región. Los senderos bien señalizados garantizan una experiencia de senderismo segura y agradable para visitantes de todos los niveles de habilidad.
Puedes encontrar más información en la página oficial de turismo de Liencres.
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