Hay muchas espectaculares plazas que ver en Roma, pero hay una que sobresale por encima de todas y en la que el barroco domina la belleza de la plaza.
Se trata de la Piazza Navona, una de las más famosas de la ciudad situada entre estrechas callejuelas. No te vayas de Roma sin conocerla. A nosotros nos encanta.
La plaza tiene una forma alargada que no es casualidad y es que se encuentra en el mismo lugar donde se encontraba el Estadio de Diomeciano, del siglo I. De hecho, todavía queda algún resto del estadio.
Las 3 Fuentes de la Piazza Navona
Todos los edificios que se encuentran alrededor de la Piazza Navona son espectaculares pero lo que destaca por encima de todo son sus fuentes.
En total son 3 las fuentes que podemos encontrar en la plaza, todas barrocas, una en el centro y las otras 2 a ambos laterales.
La fuente central es la Fontana dei Quattro Fiumi, o de los Cuatro Ríos.
Se llama así porque está formada por 4 estatuas que representan los principales ríos de los cuatro continentes conocidos en la época en la que fue construida, el año 1651 por Bernini. Se trata del Nilo, el Río de la Plata, el Ganges y el Danubio.
Sobre las estatuas encontramos un obelisco de 16 metros recordando los obeliscos que se situaban en el centro de los circos romanos.
A uno de los lados encontramos la Fuente de Neptuno, obra de Giacomo della Porta, que data de 1574 aunque estuvo abandonada hasta 1873.
Al otro lado se encuentra la Fuente del Moro, también de Giacomo della Porta en 1573 aunque perfeccionada por el gran Bernini.
Estas dos bonitas fuentes se encuentran ensombrecidas por la majestuosidad de la fuente central.
Paseando por la Piazza Navona. Santa María in Agone
En la Piazza Navona siempre encontrarás un gran ambiente.
En ella hay una gran cantidad de restaurantes y terrazas, con precios muy altos por cierto, y también es posible encontrar numerosos artistas callejeros y muchos pintores.
Y si vas en Navidad te encontrarás con uno de los mercadillos navideños más interesantes de Europa.
Además de las 3 fuentes, cada edificio tiene algo especial pero hay dos que debemos destacar.
Uno de ellos es el Palazzo Pamphili, que actualmente es la Embajada de Brasil y que fue residencia del Papa Inocencio X, al que se debe el aspecto actual de la plaza.
El otro es una iglesia, la de Santa Agnese in Agone. Esta iglesia fue construida por Borromini y que se encuentra en el lugar donde a Santa Inés, según la leyenda, le crecía el pelo de manera milagrosa para tapar su desnudez durante su martirio.
La Iglesia de Santa Agnese in Agone es también protagonista de otra leyenda y es que la estatua de la Fuente de los Cuatro Ríos que se encuentra situada frente a la iglesia se encuentra mostrando un gesto de desagrado y es que Bernini y Borromini eran grandes rivales.
No se sabe si realmente era lo que quería transmitir Bernini pero es una leyenda muy curiosa.
Iglesias cercanas a la Piazza Navona
Cerca de la Piazza Navona podemos encontrar Sant’Ivo alla sapienza, que además es considerada como una de las grandes obras maestras del barroco.
Es obra de Borromini, quizás su mejor obra, y es muy famosa su cúpula helicoidal. La pena es que sólo se puede visitar los domingos de 9h a 12h.
Casi anexa a la Piazza Navona, encontramos la Iglesia de San Luis de los Franceses y destaca sobre todo por los lienzos de Caravaggio que se encuentran en su interior. Es una iglesia que prácticamente es obligado visitar.
Y muy cerquita también encontramos la Iglesia de Santa María della Pace, en esta ocasión renacentista. En su interior podemos encontrar frescos de Rafael y debemos destacar también su Claustro, de Bramante.
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